Al menos siete personas murieron y otras tantas resultaron heridas en los últimos dos meses en accidentes de caza en España. El último se produjo ayer, cuando un cazador resultó herido grave en el término municipal de Cunquilla de Vidriales, en la comarca zamorana de Benavente y Los Valles, mientras que otro, vecino de San Jaume d'Enveja (Tarragona), murió el pasado viernes, en ambos casos al recibir un disparo de un compañero.
La mayoría de los sucesos se produjeron por disparos accidentales de personas que participaban en actividades cinegéticas, a excepción de dos casos en los que los afectados eran transeúntes.
Durante el mes de octubre se contabilizaron dos muertos, un vecino de Villalba (Lugo), de 61 años, y un cazador de 28 que recibió un disparo durante una montería en Aroche (Huelva) y perdió la vida a las pocas horas. El mismo mes resultaron heridos un cazador en el municipio lucense de Ribadeo, otro en Mura (Barcelona), otro en una finca de la localidad jienense de Santa Elena y un hombre de 50 años que recibió un disparo en una cacería en Cantejeira (León).
Durante el mes de noviembre hubo cinco muertes, de las cuales tres se produjeron el día 11.