“No puedo imaginar qué sentiré cuando el último elefante o rinoceronte salvaje muera. Ni sé cómo les explicaría a mis hijos que dejamos que esto sucediera”, comienza la carta que el príncipe Guillermo ha publicado en el periódico ‘Financial Times’. El hijo de la princesa Diana y de Carlos de Inglaterra es un consumado cazador y lo ha demostrado en numerosas ocasiones, incluso cazando en España, lo que no se contrapone, tal y como ha quedado demostrado en numerosas ocasiones, con su firme y férrea defensa de las prácticas ilegales contra los animales.
El duque de Cambridge es presidente de la organización United for Wildlife -asociación con la que también colabora su hermano, Enrique-, un grupo formado por otras ONG de conservación de la biodiversidad. “La conservación también va sobre personas, no solo sobre animales: más de 1.000 vigilantes de parques nacionales han sido asesinados por cazadores furtivos; hay milicias que utilizan los beneficios de la caza furtiva para financiar masacres”, relata el nieto de Isabel II en el medio británico que, además, le ha inculcado su pasión por la caza a su esposa, la duquesa de Cambridge, Kate Middleton.
Para el Príncipe, “los criminales que saquean los recursos naturales del mundo” están condenando a los seres humanos a la pobreza y “negando a las generaciones futuras el derecho al desarrollo económico y social”. Y es que, según se refleja en el texto del ‘Financial Times’, sobre el 80% de los ingresos que recibe África viene de los turistas que acuden al continente a ver a los animales salvajes.
Guillermo de Inglaterra ha asegurado que la crisis es urgente y que “requiere una coalición de empresarios y políticos” para acabar con esta lacra y ha apuntado que ya ha hablado con líderes mundiales como el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, o el de China, Xi Jinping- ambos países están tomando medidas para detener el mercado ilegal de marfil-.
“El Gobierno de Reino Unido ha pedido la prohibición total de todas las ventas de marfil y el ejército británico ha mandado apoyos para luchar contra los furtivos en Gabón”, ha explicado Guillermo en su misiva, que finaliza diciendo a los lectores que es una batalla “que podemos ganar” y que “no podemos dejarla pasar”.