Cansados están los responsables del Tecor Sociedad de Caza A Lanzada de denunciar ante las administraciones los problemas de seguridad que existen en el vallado de la vía de O Salnés, a su paso por Sanxenxo y O Grove. Todos los años pierden a algún perro que se cuela en este espacio persiguiendo a su presa. Lo peor, advierten de nuevo, es que esta situación puede provocar un grave accidente.

El coto de caza de A Lanzada está cortado a la mitad por la vía de O Salnés. Si esta carretera estuviera perfectamente vallada, ni los animales de caza, ni los canes podrían acceder al interior de la misma. Pero la realidad no es así, denuncian en el Tecor. «Levamos cinco anos denunciando que a vía rápida está aberta. O ano pasado morreron cans e este tamén», se queja el presidente de esta sociedad, José Carlos Arosa.

Los cazadores denuncian que esta misma semana dos de sus perros se colaron en la carretera persiguiendo a un zorro. Y ambos murieron tras ser atropellados. Pero es que, además, los animales causaron serios daños a los vehículos con los que colisionaron «e un BMW tivo que ser levado pola grúa», explica Arosa. Afortunadamente, en estos accidentes no hubo personas heridas. Pero los cazadores consideran que esta situación es un peligro, tanto para sus animales como para los conductores.

Tras el accidente, Arosa pidió a los agentes de la Guardia Civil de Tráfico que realizaran un informe de por dónde se habían colado los animales, «Pero se negaron a facelo», argumenta. Y recuerda que, con la nueva Ley de Caza, se puede responsabilizar al Tecor del accidente y obligarle a pagar los daños si se demuestra que el animal que irrumpió en la carretera iba perseguido por perros de caza.

Las reparaciones

Los cazadores se quejan del mal estado en el que se encuentra todo el vallado que rodea al tramo de vía de alta capacidad que transcurre entre Sanxenxo y O Grove. «Nadie o cambiou desde que fixeron a vía», denuncia Arosa. De hecho, añade, todo el mantenimiento que se ha realizado en este cierre ha corrido por cuenta de los propios cazadores. «Xa a tivemos que arreglar en máis dunha ocasión. Pero a valla está toda levantada e aberta», afirma. El año pasado, además, remitieron escritos tanto a la consellería de Medio Ambiente como a la concejalía. Pero nadie respondió a sus quejas. La situación no puede continuar así pues cualquier día puede haber una desgracia, concluye.