Nada menos que un jabalí de 145 kilogramos consiguieron abatir un grupo de 18 miembros de la Sociedad de Caza y Pesca de Ribeira. Completada la faena, uno de los integrantes de la cuadrilla no dudó en afirmar: «Hemos debido capturar al abuelo de los cerdos salvajes de Barbanza». No fue sencillo y en la batalla resultaron heridos once de los veinte perros de caza que participaban en la expedición. Tras las atenciones veterinarias correspondientes, todos están ya dispuestos para nuevos rastreos.
La jornada comenzó pasadas las ocho de la mañana y de lo que se trataba era de capturar jabalíes, previa autorización de Medio Ambiente. El equipo se reunió y se repartió tareas por las zonas de monte para localizar a los animales. A las dos de la tarde, ya con datos concretos, volvió a juntarse. Se había visto a dos ejemplares de gran tamaño y a otros seis más pequeños. La cuadrilla decidió ir a por los mayores y en la zona de Espiñeirido vislumbraron al de 145 kilos. El jabalí emprendió la huida por la zona equivocada y se topó con un cazador que le acertó de lleno. Herido, buscó refugio en la maleza, pero los perros no le dieron tregua. Desde su guarida, el animal comenzó a moder a los canes, hasta que uno de los cazadores lo remató. El grupo también cogió otra pieza de 110 kilos.