n joven de 16 años resultó herido el pasado domingo tras dispararse en un pie cuando participaba en una batida de jabalíes que se estaba celebrando en el concello de Ponte Caldelas.
Según informaron fuentes policiales, el joven estaba participando en una jornada de caza cuando, de forma fortuita mientras estaba apostado esperando una presa, la escopeta que portaba se le disparó accidentalmente. Como el arma estaba apuntando hacia el suelo, el impacto le alcanzó en un pie.
El muchacho, que es vecino de la parroquia pontevedresa de Mourente, fue trasladado de inmediato al Hospital de Montecelo para ser atendido por los sanitarios por las lesiones ocasionadas por el disparo.
La batida en la que estaba participando el joven que resultó herido estaba autorizada y señalizada en la zona de Castrelada correctamente.
En el incidente no intervino ni la Policía Local de Ponte Caldelas ni los agentes del Puesto de la Guardia Civil del concello, ya que durante la jornada del domingo permanece cerrado. Fue la Policía Nacional la que se encargó de abrir las diligencias correspondientes.
Otro caso
Esta no es la primera vez que se da un incidente de este tipo en la comarca de Pontevedra, ya que, en el año 2012, un joven de 23 años falleció en Monte Carrio, en Vila de Cruces, después de recibir un disparo en el pecho de otro compañero de su misma cuadrilla mientras participaban en una batida de jabalíes.
En esta ocasión, el cazador, que no llevaba puesto el chaleco reflectante, se había movido del puesto que le había asignado el jefe de la batida sin comunicarlo verbalmente ni a través del transistor. Su compañero, que creyó escuchar a un jabalí detrás de un matorral, disparó, dándole de lleno en el corazón. El joven falleció en el acto y su cuerpo sin vida fue hallado metros más arriba del puesto en el que debía estar situado durante la batida.