Hasta donde trascendió está pactado un acto de entrega de poderes de carácter público, con foto oficial entre el presidente saliente José Antonio Toxa y el entrante Jesús Pérez Caramés. Se trata de poner cierre a una etapa con actitudes democráticas y formas totalmente pacíficas habida cuenta de que tanto el ex presidente como el nuevo se dedicaron munición gruesa , en este caso dialéctica, en la última fase de la campaña electoral.

Desde la propia federación, desde fuerzas vivas de la sociedad y desde el propio comité electoral dieron pasos o hicieron sugerencias en ese sentido de tal modo que ni el presidente entrante ni el saliente pusieron ningún tipo de objeción a poner foto oficial al acto de fin de etapa y trasvase de poderes.

Las distancias que se habían generado entre los distintos grupos llegaron a salpicar incluso al comité electoral cuyas decisiones habían sido criticadas desde el sector que quería dilatar el proceso, decisiones que no les habían generado ninguna duda pero que sabían que serían cuestionadas. Ahora quieren que todo quede superado. Además, el ex presidente había dimitido y anunciado que ni se presentaría ni postularía ninguna candidatura a al presidencia.

«Había que empuxar para deixar esto tranquilo», asegura un cazador que colaboró en encaminar la cuestión hacia un proceso final protocolario con apretón de manos y foto final.

En realidad es un acto simbólico porque, según información recabada, ya hay contactos entre ambos presidente y con la federación dada la inminencia de la apertura de la temporada de caza. Pero todos consideran que un toque de imagen al relevo pacífico siempre le vendrá bien a la sociedad silledense.