Román Vázquez Castro y Lola Fraiz, su pareja, figuran entre los más de 200 automovilistas lucenses implicados en accidentes con fauna salvaje en los últimos tres meses en la provincia de Lugo. El 29 de octubre, un corzo macho de unos 20 kilos se les cruzó en la carretera, de Rozas a Abadín, en Moncelos. Era domingo, sobre las siete y media de la tarde. Román, que iba al volante, frenó, pero no pudo evitar alcanzar al animal, que destrozó la defensa de su coche y le planchó el capó.
Los daños en el vehículo fueron tasados por un perito en 2.800 euros, que Román Vázquez tendrá que adelantar de su bolsillo para poder sacar el coche del taller. Deberá presentar una demanda e ir a un juicio, que cuenta con ganar porque el accidente fue un domingo, día de caza. Lola tuvo que acudir al médico días después porque tenía un fuerte dolor en la espalda. Le diagnosticaron un esguince y está pendiente de más pruebas. «Só me deu tempo a frear -recuerda el conductor-, o corzo cruzóusenos de sorpresa a uns tres metros. Tivemos sorte porque non viña ningún coche detrás nin de fronte, porque nos desprazamos. O que non sabíamos era a que se nos viña encima despois». «Non nos pasou nada grave -señala-, aínda que Lola está pendente de probas, pero hai que ir a xuízo, porque voluntariamente non pagan. Paréceme ben -añadió- que queiran ter animais soltos, pero doutra maneira, porque nos metemos nun fregado sen comelo nin bebelo. Se non fora día de caza, ¿que?».
El coche de Román, dos semanas después, aún está en el taller. Da gracias porque no se lo catalogaron como siniestro total. Lo único positivo que sacaron fue el corzo, que lo tienen guardado en un congelador.
Los agentes de Tráfico que levantaron el atestado les ofrecieron la posibilidad de llevarse el animal y no lo dudaron. De lo contrario, tendría que retirarlo la adjudicataria de la conservación de esta carretera. Aun así, les costó encontrarlo, porque fue a morir unos metros más adelante del lugar del choque, entre unas hierbas altas. Necesitaron una linterna porque era noche cerrada. «Era un macho, tiña un bo lombo e estaba ben alimentado», comentó Román.
Estos atropellos, la principal causa de siniestros en Lugo
El atropello de animales salvajes o domésticos es la principal causa de siniestralidad en las vías interurbanas de la provincia de Lugo, según afirmó ayer José Hermida, jefe de la Guardia Civil de Tráfico de Galicia. Son también muy habituales en el resto de Galicia. Hermida recordó que «el medio rural está abandonado, el cultivo cerca de las viviendas... Los animales van al cultivo, atraviesan la carretera y así surge el accidente». |