Revista de Prensa


El gobierno municipal de Ortigueira ha acordado impulsar una serie de acciones para reducir en lo posible los daños provocados por el jabalí en la zona de Ortegal. El alcalde de la villa, Rafael Girón, se ha entrevistado con responsables de la Xunta y cazadores para estudiar posibles intervenciones.
· 9/6/2009

Según ponen de manifiesto desde el Ayuntamiento ortegano, los numerosos daños ocasionados por la presencia del jabalí en las zonas habitadas responde a que las colonias de estos animales se han multiplicado, provocando numerosos casos de siniestralidad viaria y daños en los cultivos.

El alcalde de la villa, Rafael Girón, se posiciona del lado de agricultores y conductores, exigiendo actuaciones urgentes a quienes tienen competencia en la ordenación cinegética de la zona, para atajar lo que considera una “situación insostenible”. Asimismo, el progresivo abandono del rural ha propiciado que estos animales omnívoros se acerquen en busca de alimento a las áreas más habitadas, atravesando para ello carreteras y arrasando cultivos agrarios y forestales, apuntan desde el consistorio.

Girón trasladó días atrás este malestar al jefe del Servicio de Caza y Pesca de Galicia, Jesús Marquina, quien coincidió con el regidor en la necesidad de activar un plan integral que permita solventar el problema derivado, según todos los indicios que dice tener el Ayuntamiento, “de la superpoblación de jabalíes en la zona”.

Además, Marquina manifestó la disponibilidad de la Xunta para autorizar dentro del terreno cinegéticamente ordenado de Ortegal acciones de caza extraordinarias “siempre que se acredite la existencia de daños no aislados a cultivos”. El responsable de la referida área también señaló que la Consellería de Medio Ambiente aprobaría una ampliación de los cupos establecidos por el plan quinquenal que rige el tecor, aunque sólo permitiría fuera de la temporada de caza “modalidades no agresivas con otras especies”.

Por otra parte, desde la Federación Galega de Caza de A Coruña explican que el 90% de los destrozos registrados se localizan fuera de los terrenos del tecor, básicamente en el territorio de la ría Ortigueira-Ladrido, lugar protegido por el Convenio Ramsar, donde la legislación prohíbe explícitamente cualquier tipo de caza. Así, dada la envergadura del problema en la zona, se incide en la necesidad de realizar batidas, y que éstas se realicen a la mayor brevedad una vez se denuncien los daños.

Estrategia > Por lo anteriormente expuesto, el alcalde de Ortigueira reclama un programa de medidas para todo el territorio de Ortegal, fruto de la colaboración entre las partes.

Al margen de apoyar un puntual aumento de capturas, Girón defiende además la necesidad de habilitar comederos para concentrar las piezas en el monte, lejos de las explotaciones y de la carretera autonómica; instalar pastores en fincas de labor y mejorar la seguridad en la AC-862, con rozas que mejoren la visibilidad y que señales lumínicas permitan ahuyentar a estos animales.