La Asociación de Cazadores de Moaña ya cuenta con su propio Tecor (Territorio cinegéticamente ordenado) tras concluir la tramitaciíon de un largo proceso que se inició hace dos años con la segregación del Tecor Marín-Moaña. El presidente de la asociación, José Agulla,recibió la comunicación de la Consellería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio con la aprobación definitiva después de que se hubiera sometido a exposición pública y se resolviera sin alegaciones y se concluyera el plazo de cuatro meses para la delimitación del Tecor y la presentación del plan de ordenación quinquenal, que ha venido aprobado por la administración autonómica.
"Ha sido una lucha de dos años con las comunidades y con las administraciones y ahora, por fin, el Tecor ya es una realidad", asegura José Agulla. El secretario de la entidad, Cándido Couso, destaca la importante implicación de los vecinos y de las comunidades y el "tesón" de la directiva por tener un coto propio, ya que el otro compartido, con el que "no fue fácil romper", estaba muy masificado. El Tecor dispone de 2.300 hectáreas, de las que 1.600 son cedidas por las comunidades de montes de Moaña, Domaio y Meira, con las que se llegó a acuerdos de uso, que ya pasaron por las asambleas de Domaio y Meira y próximamente pasará por la de Moaña. Cándido Couso asegura que se firmarán convenios de uso "para que la convivencia y los proyectos de ambas partes sean buenos y no den lugar a conflictos".
La caza principal será conejo y jabalí, que es la fauna predominante en este territorio. La sociedad cuenta con 80 cazadores y dispone de una reserva de 10 plazas para los foráneos, de otro coto, que pueden pedir una tarjeta anual de socio, por importe de 300 euros.
La aprobación definitiva del coto llega en un perídoo inhábil de caza, fuera de temporada, aunque desde la sociedad todavía tienen que desarrollar un duro trabajo de preparación del monte y la convocatoria de elecciones para ver si sigue la actual directiva o una nueva.
La superficie está perfectamente delimitada y se realizó un plan de ordenación que incluye hectáreas, vegetación, fauna y previsión de suelta. La intención de la sociedad es poder realizar una suelta de 300 conejos en este primer año.
Se realizaron muestreos para valorar la fauna, que es principalmente de conejos y jabalí. Cándido Couso considera que después de un año sin cazar en el territorio, la poblacion de conejo, salvo que se vea afectada por un brote de enfermedad, habrá ido en aumento, como tam,bién la de jabalí "que se ha ido viviendo a nuestro campo".
El secretario asegura que las Comunidades de Montes siguen siendo las propietarias del terreno y lo siguen gestionando, de ahí la necesidad de firmar los convenios de uso para evitar injerencias de la caza en los proyectos comunales. Es el caso de la explotación de cabras de Meira que impide cazar los jueves, cuando están sueltas.El nuevo tecor también ha reservado una zona para el adiestramiento de perros, aunque ahora es época de cría y no se puede acudir. Tampoco hay previstas batidas, salvo que vecinos las pidan por daños del jabalí. En septiembre es cuando los cazadores podrán empezar a cazar con perro y cuando se abra la temporada en octubre, con escopeta. |