Revista de Prensa


A falta de un día para la celebración del Trofeo Nacional de Caza del Zorro, para el que los ecologistas han hecho un llamamiento al boicot después de haber pedido infructuosamente su suspensión, la Federación Gallega de Caza ha presentado el primer estudio, elaborado por científicos de la Universidade de Santiago, sobre la situación de la especie en Galicia. ¿La conclusión? El raposo en Galicia goza de buena salud y su supervivencia en absoluto está amenazada.
R. Romar · 24/1/2009

«La población en Galicia se mantiene estable en los últimos años, ni disminuye ni aumenta, y lo que no observamos en ningún momento fue una reducción a causa de la caza», constata la profesora de la Facultad de Veterinaria de Lugo Ana López.

Los datos revelan que la densidad media de la especie en Galicia se eleva a 2,71 ejemplares por kilómetro cuadrado, la mayor de toda España, ya que en el resto del país oscila entre los 0,34 de zonas de encinar de Burgos y los 2,50 localizados en entornos de regadío de Zaragoza.

En total, y si hace una extrapolación, en la comunidad habitan en torno a 80.000 zorros. Un dato a subrayar si se tiene en cuenta que la Consellería de Medio Ambiente ha permitido en la actual temporada un cupo de caza de 25.995 zorros. Sin embargo, y de acuerdo con la estadística de los últimos años, las piezas abatidas suman 2.872 ejemplares, apenas un 10% de lo autorizado. Fuentes de Medio Ambiente aseguran, de hecho, que en la competición nacional que se celebrará hoy en Rodeiro no se matarán más ejemplares que en un día normal de caza.

Medio Ambiente, pese a las protestas ecologistas, ha autorizado la celebración del trofeo, aunque mantendrá un dispositivo de vigilancia de 14 agentes del servicio de guardería de Pontevedra, que velarán por que la competición se lleve a cabo dentro de los márgenes legales.

Medidas de seguridad

La Guardia Civil, en colaboración con la organización, montará un dispositivo para evitar que se produzcan incidentes, en especial tras el anuncio de varios grupos ecologistas de boicotear la cacería o, cuando menos, de hacer todo el ruido posible para ahuyentar las piezas. Las fuerzas del orden velarán, además, para defender el derecho de manifestación de los ecologistas, que han convocado una concentración para la una de la tarde en Rodeiro. El despliegue fue coordinado en una reunión entre el teniente coronel de la Guardia Civil de Pontevedra, el alcalde de Rodeiro, el delegado de Medio Ambiente, el subdelegado de Gobierno y el presidente de la Federación Gallega de Caza. El número de miembros que integran el dispositivo no se ha facilitado por razones de seguridad.