> Las pruebas se celebraron en siete tecores diferentes durante las últimas semanas
La cuadrilla ‘A Xesteira’ de Sarria se hizo con el triunfo en los III campeonatos de zorro de la provincial de Lugo al conseguir abatir un total de once zorros y sumar 110 puntos. Con un promedio de 120 cazadores por jornada, esta temporada se celebraron un total de siete competiciones puntuables en otros tantos tecores de la provincia.
La cuadrilla que terminó en segundo lugar esta edición de los campeonatos de zorro fue ‘Parrillada Abel’ de Lugo con doce zorros abatidos y 96 puntos. El tercer puesto fue para ‘Transformaciones Huerta’ de A Terra Chá, que capturaron seis zorros con los que sumaron 56 puntos. Aunque los segundos capturaron un número mayor de ejemplares que los primeros, el sistema de puntuación durante cada jornada —veinte puntos para el primero, dieciocho para el segundo, dieciséis para el tercero y así sucesivamente— elevó a la cuadrilla sarriana hasta lo más alto.
Los cotos que acogieron la celebración de estos campeonatos fueron O Incio, Sarema y Vilamaior, Ribeira de Piquín, O Saviñao, A Fonsagrada, Neira de Rei y, por último, Sarria y Láncara. En este último fue en el que se capturó un número mayor de zorros, hasta 14, mientras que A Fonsagrada fue el lugar en el que se cazaron menos, tan sólo uno, debido a la nieve y al frío. La participación media por campeonato es de diez cuadrillas, un número bastante elevado.
El organizador de los campeonatos de zorro, Miguel López Vázquez, se muestra satisfecho con la participación en las diferentes citas y la acogida que tiene este evento en Lugo. Después de tres años de celebración, el campeonato goza de buena salud debido, en gran parte, a los excelentes resultados que consiguen los participantes en el mismo. La idea de la creación de estos campeonatos surge, según López Vázquez, «pola necesidade de aproveitamento do zorro porque é un animal que ten poucos afeccionados». Para la elaboración del calendario de competición, «a Federación distribúe as probas por diferentes tecores, intentando que nunca se repita ningún». Las dificultades que entraña la prueba —como el seguimiento del rastro de los zorros por parte de los perros— es un aliciente más para los intrépidos participantes en el campeonato.
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