Una batida de caza de jabalíes acabó mal ayer al mediodía en la localidad de Cenlle, en la comarca ourensana de O Ribeiro. Un cazador de 49 años, Santiago Armesto Rodríguez, vecino de la parroquia lucense de Castro de Rei de Lemos, en el municipio de Paradela, resultó con heridas muy graves en la cabeza tras recibir un tiro accidental de una bala rebotada por una piedra que le impactó en la frente, según informaron fuentes de la Guardia Civil y de Emergencias.
El accidente sucedió poco antes de las dos menos cuarto de la tarde. Los servicios de emergencia acudieron a la carretera entre Valdepereira y Cenlle, cerca de la cooperativa de esta localidad. La bala procedía del arma de uno de los participantes en la batida, un hombre de 48 años y vecino de la misma localidad.
Según las primeras versiones que circulaban en Castro de Rei sobre el percance, esta partida de diez cazadores de la zona de Sarria se desplaza dos o tres veces al año a cazar en el coto ourensano en el que se produjo el suceso. Por las informaciones recabadas, el hecho pudo ocurrir en el coto de la sociedad Santa Bárbara, de Ribadavia. Y por la época del año y la característica de la munición, una bala, cuando para la caza menor se suelen usar perdigones, fuentes relacionadas con el sector de la caza apuntaban a que podían estar participando en una batida al jabalí. Santiago Armesto había sido invitado por unos amigos a participar en esta batida, según fuentes vecinales.
El herido fue trasladado por un helicóptero de Emergencias de Galicia al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense. Santiago Armesto fue intervenido quirúrgicamente para intentar reparar las heridas causadas por la bala, pero su estado sigue siendo muy grave. También intervinieron en la evacuación del herido agentes de la Guardia Civil y miembros de la agrupación Grumir de Ribadavia, además del equipo del 061.
Conmoción
La noticia causó gran conmoción entre los cazadores de la zona de Sarria y del coto de Bóveda, consorciado con el de Paradela. Santiago Armesto está soltero. Había trabajado en la construcción en Barcelona y hace unos años regresó a Paradela para ayudar en la explotación de su hermano, después de que este falleciese accidentalmente al caer en un foso. En Castro de Rei reside con su cuñada, su sobrina y su padre, que permanece encamado desde hace tiempo.
Desde el primer momento, fuentes próximas al caso apuntaron al carácter accidental del suceso y que la bala alcanzó a la víctima de rebote, de forma fortuita y desgraciada. |