La crisis económica también afecta a los cazadores. Aunque no se ha notado un descenso del número de licencias, los responsables de las federaciones gallegas perciben que en los últimos años "los cazadores se quedan más en sus zonas y cada vez viajan menos a Castilla la Mancha o Castilla León, que son los grandes paraísos de la caza", apunta Juan Ángel Alonso. Por contra, el turismo que acude a Galicia para practicar esta afición se dirige principalmente a Lugo y Ourense para cazar corzos. "Lugo es actualmente una de las provincias corceras por excelencia", destaca el presidente de la federación pontevedresa.
La caza mayor también está experimentando una subida en Galicia. De hecho, de los 73 tecores que existen en Pontevedra, hay una media de dos cuadrillas de jabalí. "Mucha gente que cazaba zorro se ha especializado en el jabalí", explica Alonso.
Los días hábiles para los cazadores son los jueves, domingos y festivos, aunque son las jornadas dominicales en las que más aficionados se reúnen en los montes.